viernes, mayo 25, 2018

En el borde de la locura

Estuve meditando por mucho tiempo, tratando de decidir si era una buena idea escribir esto o no pero, a final de cuentas, creo que es una buena forma de desahogarme un poco, aunque vaya al mundo entero. Lo que sigue es una visión personal al trabajo excesivo y sus consecuencias. Si el tema no les interesa, sáltenselo.



Fue un miércoles, mientras regresaba a casa y, un poco después mientras intentaba dormir, que empecé a sentir el pánico. "¡Me estoy volviendo loco!" y "no voy a salir de esta". No puedo describir con palabras lo que pasaba por mi mente en ese momento, pero realmente me asustó.

Ese miércoles, después del trabajo, había ido a un bar a escuchar cantar a una amiga. El concierto se había cancelado porque llovía, pero igualmente me senté a tomar una cerveza y platicar un rato. Estaba físicamente y mentalmente cansado. Llevaba en ese punto más de 4 semanas trabajando todos los días de manera bastante intensiva, y teniendo algunos problemas externos que no me dejaban relajarme. Pero al mismo tiempo pensaba que no era nada del otro mundo. Muchos otros han hecho eso y mucho más, y no los vemos quejándose por todos lados, ¿o si? Tal vez fue la media hora que me relajé, o había llegado al límite de mis capacidades, y la cerveza simplemente desencadenó todo; la verdad es que no lo sé. Pero mi cabeza empezó a jugar conmigo mientras regresaba a casa.

Como dije antes, no lo puedo describir con palabras. No es que tuviera visiones, u oyera voces, o algo por el estilo; sabía perfectamente bien dónde estaba, a dónde iba, y lo que sucedía a mi alrededor. Pero al mismo tiempo, me pasaban flashes por la cabeza; ideas fugaces, sin sentido, y al mismo tiempo fuertes, convincentes. Y me empezó a dar miedo. ¿Es esto lo que llaman un burn out? Así estuve unas horas. Hasta que tomé la decisión que (1) podía salir de esta, y (2) que no podía dejar que pasara de nuevo. Y ese es mi nuevo propósito: trabajar mucho, trabajar fuerte, pero también trabajar inteligentemente. Tomarme mis horas y días de descanso. Disfrutar de la vida que está al rededor. Y seguir adelante. Hasta ahora, creo que lo estoy logrando, pero tengo que estar atento y jugar a la defensiva por unos meses.

2 comentarios:

Dr. Peñaloza dijo...

Rafa: Con conocimiento de causa me atrevo a contestar afirmativamente a tu pregunta: tal como tú mismo lo dices, el momento que señalas fue la crisis de un cuadro clásico de Síndrome de Burnout, que sufriste después de varias semanas de trabajo mental intenso y continuo. En realidad no es tan raro y aunque haya muchas personas que toleran un gran stress por trabajo extremo, todo tiene un límite y no representa ninguna debilidad reconocerlo; por el contrario, es muy adecuado enfrentarse al problema. El Burnout ya está bien identificado en su origen y antecedentes y es importante señalar que sus manifestaciones no son sólo de tipo emocional,sino que puede acarrear otras muchas consecuencias físicas, lo que por supuesto agrava la situación. Son muy positivas las decisiones que has tomado, es decir, salir del problema y no dejar que se presente nuevamente. Tu mismo señalas ya lo mejor para esto que es no volver a trabajar ni con esfuerzo ni con continuidad ni por un tiempo excesivos. Debes hacer un plan de tiempo y esfuerzo para cada uno de tus proyectos de trabajo, independientemente de las presiones reales o de gran responsabilidad que tu siempre te has propuesto. LO MÁS IMPORTANTE ES TU SALUD, no sólo por tí sino por que ya te debes a una familia propia (Antonella y Giacomo).
Despreocúpate de grandes responsabilidades propias o del trabajo, disfruta tus merecidos descansos (noches, fines de semana, vacaciones), practica algún esfuerzo físico (ejercicio) con regularidad, practica con regularidad tus hobbys (la fotografía, escribir tus relatos,...)come bien, disfruta tu sueño. Pondera bien si crees necesario algún apoyo psicológico con un buen especialista
Si de algo puede servir quiero que siempre tengas en mente que tu mamá, yo y todos en tu familia estamos en forma y en posibilidades de apoyarte por cualquier medio. Si decides tomarte unas vacaciones propias y olvidarte un tiempo de cualquier problema; si decides viajar con tu familia o cualquier otra cosa, tienes todo nuestro apoyo.
Aprovecho para confesarte y agradecerte que tú y tus hermanos han sido una felicidad y un ejemplo en mi vida. Soy el padre que les tocó pero yo tengo los hijos que no me merecía. Te quiero mucho y quiero que te sientas TOTALMENTE BIEN con lo que te tocó vivir.
Tu papá.

Dr. Peñaloza dijo...

Rafa: Con conocimiento de causa me atrevo a contestar afirmativamente a tu pregunta: tal como tú mismo lo dices, el momento que señalas fue la crisis de un cuadro clásico de Síndrome de Burnout, que sufriste después de varias semanas de trabajo mental intenso y continuo. En realidad no es tan raro y aunque haya muchas personas que toleran un gran stress por trabajo extremo, todo tiene un límite y no representa ninguna debilidad reconocerlo; por el contrario, es muy adecuado enfrentarse al problema. El Burnout ya está bien identificado en su origen y antecedentes y es importante señalar que sus manifestaciones no son sólo de tipo emocional,sino que puede acarrear otras muchas consecuencias físicas, lo que por supuesto agrava la situación. Son muy positivas las decisiones que has tomado, es decir, salir del problema y no dejar que se presente nuevamente. Tu mismo señalas ya lo mejor para esto que es no volver a trabajar ni con esfuerzo ni con continuidad ni por un tiempo excesivos. Debes hacer un plan de tiempo y esfuerzo para cada uno de tus proyectos de trabajo, independientemente de las presiones reales o de gran responsabilidad que tu siempre te has propuesto. LO MÁS IMPORTANTE ES TU SALUD, no sólo por tí sino por que ya te debes a una familia propia (Antonella y Giacomo).
Despreocúpate de grandes responsabilidades propias o del trabajo, disfruta tus merecidos descansos (noches, fines de semana, vacaciones), practica algún esfuerzo físico (ejercicio) con regularidad, practica con regularidad tus hobbys (la fotografía, escribir tus relatos,...)come bien, disfruta tu sueño. Pondera bien si crees necesario algún apoyo psicológico con un buen especialista
Si de algo puede servir quiero que siempre tengas en mente que tu mamá, yo y todos en tu familia estamos en forma y en posibilidades de apoyarte por cualquier medio. Si decides tomarte unas vacaciones propias y olvidarte un tiempo de cualquier problema; si decides viajar con tu familia o cualquier otra cosa, tienes todo nuestro apoyo.
Aprovecho para confesarte y agradecerte que tú y tus hermanos han sido una felicidad y un ejemplo en mi vida. Soy el padre que les tocó pero yo tengo los hijos que no me merecía. Te quiero mucho y quiero que te sientas TOTALMENTE BIEN con lo que te tocó vivir.
Tu papá.