Moon
Durante la culminación del Stadtfest (Festival de la Ciudad) en Dresden de este año, celebrando el 800 aniversario de la fundación oficial de la ciudad, tuvimos la oportunidad de presenciar la obra Moon de la compañía francesa Plasticiens Volants.
Todo el espectaculo se lleva a cabo con inflables manejados desde abajo por un grupo de personas, y dos o tres actores que aparecen muy poco tiempo. Al principio creimos que tal vez el mejor lugar para presenciarlo, por lo mismo de los inflables, era desde el puente. Sin embargo, llegamos un poco tarde (solo una hora antes de que comenzara) y el puente ya estaba saturado, por lo que bajamos al prado, con la esperanza de lograr ver algo.
Sorprendentemente, esos lugares en el prado eran los mejores, pues las marionetas pasaban entre nosotros, y sentíamos la dinámica de la obra.
La historia, muy sencilla: un pescador, una luna, un amor. La realización, muy buena.
Aunque duró apenas 60 minutos, creo que fue uno de los mejores espectáculos que tuve oportunidad de ver en el festival de este año, y dudo que sea mejorado pronto.
Todo el espectaculo se lleva a cabo con inflables manejados desde abajo por un grupo de personas, y dos o tres actores que aparecen muy poco tiempo. Al principio creimos que tal vez el mejor lugar para presenciarlo, por lo mismo de los inflables, era desde el puente. Sin embargo, llegamos un poco tarde (solo una hora antes de que comenzara) y el puente ya estaba saturado, por lo que bajamos al prado, con la esperanza de lograr ver algo.
Sorprendentemente, esos lugares en el prado eran los mejores, pues las marionetas pasaban entre nosotros, y sentíamos la dinámica de la obra.
La historia, muy sencilla: un pescador, una luna, un amor. La realización, muy buena.
Aunque duró apenas 60 minutos, creo que fue uno de los mejores espectáculos que tuve oportunidad de ver en el festival de este año, y dudo que sea mejorado pronto.
2 comentarios:
Qué chido! Por qué chingaos sólo nos tocó un calor de la jodida y no todos los festejos!?
Eso les pasa por venir en la fiebre del mundial; ahora todo es felicidad (aunque el calor no se ha ido)
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