jueves, junio 14, 2007

Ocho cosas sobre mí

Pues Cuquita la Pistolera me ha mandado este meme y, como tengo un poco de tiempo antes de salir a la oficina y me encanta hacer este tipo de cosas (a fin de cuentas, mi vida es pública) aquí les va. La idea es sencilla: escribir ocho cosas (supongo que "interesantes") sobre mí.

Uno: Cuando era chico, jugué durante varios años football americano con los Centinelas del Cuerpo de Guardias Presidenciales (sí, en instalaciones del ejército). Ganamos varios juegos, pero yo nunca anoté ningún touchdown. Cuando tuve mi gran oportunidad, la desperdicié porque no corrí al máximo de mi capacidad, simplemente troté, como lo hacía en los entrenamientos. Me quedé a media yarda de anotar. En ese momento entendí lo que decía mi entrenador: entrena como si estuvieras en un juego, y juega como si estuvieras entrenando.

Dos: Me arrepiento mucho de nunca haberme interesado por la historia. Ahora hay cosas que no entiendo cabalmente, por culpa de mis enormes huecos en esa área.

Tres: Soy un adicto a la cultura pop y sus relaciones. Por ejemplo, puedo fácilmente escuchar y distinguir gran parte de la música pop, o leer los bestsellers del momento o ver las películas que no te exijen nada a cambio.

Cuatro: Adoro discutir sobre religión y sobre filosofía; y considero que la política es, casi siempre, un tipo de religión.

Cinco: Cuando era chico, era totalmente intolerante a la frustración. Lloraba ante la más mínima provocación. Y cuando digo "chico" no me refiero a tener 4 años, sino 12. Un día decidí que no debía llorar nunca más, por ningún motivo. Y no lo hice por cerca de 8 años. Agradezco mucho a la dama que hizo de nuevo (y en repetidas ocasiones) surgir mis lágrimas. Creo que ahora tiendo más a ser una persona normal en ese aspecto.

Seis: Hablando de normal, una amiga mía me dijo una vez que "la gente normal es la gente que no piensa". Desde entonces, adoro cuando me dicen "es que tú no eres normal".

Siete: Soy pésimo para iniciar conversaciones. Necesito que alguien inicie un tema, y probablemente lo pueda continuar y extender el diálogo; pero en esos momentos de silencio incómodo, yo simplemente soy incapaz de pensar en un tema para incluir.

Ocho: Soy muy flojo. Y ya me di por vencido intentando cambiar eso.

Eso es todo. Como yo sé que no a todos les gusta que les pasen este tipo de batutas, simplemente la dejo aquí abierta para quien se anime a continuar este meme.

2 comentarios:

Cuquita, la Pistolera dijo...

Oye Rafa pero qué barbaridad ¿cómo que pasaste ocho años sin llorar? Me has dejado impactada, no sabía que eso se podía lograr con tomar una decisión y ya. Aunque he de decir que yo he llorado tanto que ahora cuando lloro sólo sale una miserable lagrimita. Y entonces quedo mal con la persona que está al lado, porque ha de pensar que justo, esa lagrimita que salió con tanto esfuerzo, es falsa.
Jújules

Saludoos

Rafael Peñaloza dijo...

Hola Cuquita, gracias por tu comentario. Baste decir que esos años no fueron años plácidos en general. Me volví muy cínico e insensible... y a veces demasiado honesto; y todavía no se me quita :P. Y, aunque parezca contradictorio, también trajo la depresión.
Pero, a veces, qué rico es llorar!