Cómo has cambiado...
¡Cómo has cambiado, Rafael! Si, hace mucho que sabes que no eres el mismo tipo con el dolor que escribía, pero dentro, donde otros no veían, seguías siendo el mismo, únicamente la máscara había cambiado, de hecho, sólo habías encimado una más nueva sobre la vieja, o al menos eso pensabas.
¿Sigue siendo así? No, Rafael, realmente has cambiado, y eso vino como una sorpresa para tí, ayer que lo descubriste.
Si, el mismo ser que hace apenas cuatro navidades se rehusó a bailar en frente de un reducido grupo de familiares cercanos, ayer se animó a cantar frente a varios desconocidos, en solo y a capela, y no cualquier canción, sino la canción, a petición de la festejada.
Si Rafael, cómo has cambiado. Antes fantaseabas con hacer sufrir a los asistentes a una fiesta; ahora lo haces sin misericordia atormentándolos con tu voz... y sin siquiera estar borracho.
6 comentarios:
Si, si intentas ser algo, aunque empieces por parecer una máscara, termina por ser parte de ti, supongo que porque cuando quieres algo es porque realmente lo eres en el fondo no? Es una de las "magias motivacionales" que nadie cree pero que son ciertas ;-). O talvez solo quiere decir que en la vida cada vez son más las cosas que te importan menos
Interesante idea me acabas de provocar con tu comentario, Rochy. ¿Tenemos una "cuota de importancia" que no podemos superar? Para darle más importancia a algo, debemos reducir la importancia de otra cosa. A lo largo de la vida, vamos aumentando la importancia de unas cuantas cosas, al precio de reducir la de otras... así, al final tenemos sólo unas pocas, pero que nos importan mucho.
Pero no, si quieres ser algo no necesariamente es porque realmente lo eres en el fondo... o, ¿qué pasaría con aquellos que quieren ser duendes o vampiros?
Pues los que quieren ser así, terminan siéndolo no? digo, al menos lo humanamente mas cercano a eso. Por ejemplo, talvez no recuerdes que alguien te dijo alguna vez, los que son darketos, se visten así porque tienen pensamientos oscuros, lo mismo que tienen dentro, lo reflejan por fuera. Mas bien diria que si no logran serlo, es porque no lo quieren ser realmente (y no lo son por dentro) no?
Creo que no estoy de acuerdo contigo, Rochy. No creo que sea el mejor ejemplo, pero ¿quién es realmente este ser? ¿El maquillaje blanco? ¿El fondo negro? ¿La papilla gris? ¿Los tres a la vez?
Al menos sé que tú sí cantaste Bésame Mucho y no Pésame Mucho...
Eso de evolucionar está bien y es normal. Es parte del viaje.
Muy cierto, chiva, pero para lo atroz de mi voz, la canción bien pudo haberse llamado pésame mucho en esta ocasión.
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