martes, diciembre 14, 2004

Invierno o Infierno

Reflexionando sobre el parecido de estas dos palabras, me pregunto si tendrán el mismo origen, o es solo una coincidencia del lenguaje.
Claramente, la visión de un infierno helado requeriría de un enorme cambio de paradigma, para dejar de lado la clásica descripción de llamas y hombrecillos de color rojo. Pero, sería tan descabellado? Pensemos un momento las circunstancias en las que el hombre sufre más. Yo conozco a muchos que son capaces de irse a postar ante un calor abrasante, y que de hecho lo hacen con gusto; pero a cuántos han visto que, por voluntad propia, se presentan ante un ambiente helado, a "disfrutar del clima"? En cuanto la temperatura baja un poco, el ser humano se siente desconsolado, y busca la forma más efectiva de acabar con esa sensación. Será que el hombre se siente más atraido al calor, o es sólo un signo de nuestra natural inclinación al pecado?
Por otro lado, qué clase de paraíso es aquel en el que sólo hay luz, y reflejos? Yo sufriría de un dolor de cabeza que me cegaría en menos de 1 hora; es eso la dicha eterna?
En fin, los dejo con estas reflexiones que comenzaron gramaticales, y terminaron no sé dónde.
Por favor, me gustaría conocer su opinión al respecto.

5 comentarios:

Rafael Peñaloza dijo...

Manuel tiene razón. Si leemos el canto XXXII, donde habla de la 1a zona del pozo del cocito (zona Caína), leemos a partir del verso 22:

"Por lo que me volví, y tuve adelante
y bajo los pies un lago que por el hielo
tenía de vidrio y no de agua el semblante.
No cubre su curso con tan grueso velo
en invierno el Danubio en Austria,
ni el Tanáis allá, bajo el frío cielo,
como era aquí; que si el Tambernick
le hubiera caído encima, o el Pietrapana,
no habría hecho siquiera crujir la orilla.
Y así como a croar se está la rana
con el morro fuera del agua, cuando sueña
que tiene mucho a segar la aldeana,
lívidas, hasta donde el rubor avanza,
estaban las sombras dolientes en la escarcha
rechinando los dientes como cigüeñas.
Tenían abajo todas vuelta la facha;
de la boca el frío, y de los ojos la triste alma
en ellos como testigos se daban.

Anónimo dijo...

Infierno viene del latín infernum. Invierno viene de ivierno. Y esta del latín (tempus) hibernum.

Yixus

Anónimo dijo...

El mito del rapto de Perséfone y su permanencia en el inframundo (inferis) durante seis meses de cada año, que conlleva la trizteza de Deméter (la explicación mitológica de las estaciones otoñal e invernal) hacen pensar que las palabras "invierno" e "infierno" comparten una raíz común (o al menos un concepto). Para estos helenos (y para los posteriores latinos) el inframundo era un lugar frío y oscuro, idea muy acorde con la del invierno.

Anónimo dijo...

Fe de Erratas: donde dice "trizteza", debe leerse "tristeza".

Anónimo dijo...

comúnmente se cree que no por similares dos palabras tienen obligatoriamente algún tipo de relación mutua, sin embargo si entendemos que la etimología es una fuerza dinámica, el solo hecho de que sean similares ya les otorga una relación etimológica mutua impuesta por el uso, la dinámica y el carácter mismo de esas palabras, en cuanto a la procedencia, esta se debe estimar no en sentido geográfico sino de factores comunes universales. en mi opinión son la misma exacta palabra infierno e invierno, e incluso además un silogismo de opuestos y esto es por el concepto nórdico acerca del inframundo. un lugar eternamente helado y oscuro.
el infierno según lo refiere la biblia sin embargo, esta caracterizado por fuego eterno, azufre y calor extremo a un nivel insoportable. cabe recordar que el hielo puede producir quemaduras y que llegado un punto extremo puede que fuego e hielo sean indistinguibles en cuanto a sus efectos o percepciones espirituales, dado que infierno es un concepto espiritual no por eso menos físico que el invierno más gélido que conozcamos.