Somos altamente manipulables

"Brillante conclusión" dirán todos ustedes, "como si eso fuera algo nuevo". El punto es que quiero contarles una historia que me tiene sorprendido, por lo obvio del hecho, y porque aún con tanta obviedad, no es tan notorio.
En una ocasión, por azares del destino, una amiga estaba presente mientras escuchaba música de Nightwish, y le pregunté si le gustaba. Me contestó que no; no me pareció raro, hasta ese punto.
Poco tiempo después, fui a su departamento, y de topo con la sorpresa, al entrar, que está escuchando End of All Hope. Cuando le pregunté por qué estaba escuchando a Nightwish, si no le gustaba, ella me contestó: "esto no es Nightwish, es Final Fantasy".
Obviamente, no le creí, y fui a verificar lo que decía. Resulta que alguien con algo de tiempo libre había hecho un video con imágenes de Final Fantasy VII (creo) y la canción mencionada. Como ella es extremadamente fanática de Final Fantasy, en cuanto vio el video, le encantó; pero eso incluía una canción que en cualquier otra circunstancia ella habría rechazado.
Hice un pequeño experimento, la siguiente vez que fue a mi departamento puse el disco Century Child, poniendo atención de que End of All Hope fuera reproducida en medio.
Para no molestarla, puse un volumen bajo, pero audible para ella. Con las primeras canciones no hubo ninguna reacción, sin embargo, cuando comenzó End of All Hope, ella reaccionó de inmediato. "Ah!" - dijo - "es la canción de Final Fantasy, sube el volumen por favor".
Yo no pude contener una expresión de desagrado. Odio que alguien la llame "canción de Final Fantasy" solo porque alguien, sin ninguna relación con el juego, o con Nightwish hizo un video que los relacionaba; es como si yo tomara, no sé, El Rey de Vicente Fernández, e hiciera un video de abejas volando, y alguien llamara a El Rey "la canción de las abejitas".
Pero bueno, me desvío del tema.
Escuchó con gusto la canción después de que subí el volumen. Pero cuando terminó, y vino la siguiente canción de Nightwish, de inmediato me pidió que bajara el volumen. Le pregunté la razón (aunque sabía la respuesta, sólo quería confirmar) y contestó que no le gustaba esa música.
En fin, no puedo creer que siendo tan obvio, ella misma no se haya dado cuenta de que su gusto por la música estaba asociado a factores externos que nada tenían que ver con la música en sí.
Supongo que todos nuestros gustos están afectados de tal forma. Es sólo tan fuerte cuando uno lo nota tan abiertamente.